¿De qué hablamos en este artículo?
- ¿Qué es el packaging en cosmética natural?
- Cómo diseñar el packaging de tu producto cosmético
- #1. Piensa en tu cliente objetivo y defínelo
- #2. Investiga cómo compra este cliente objetivo
- #3. Identifica tu identidad de marca
- #4. Conoce los materiales más comunes en packaging
- #5. Elige tu estilo
- #6. Decide los colores y la tipografía que quieres utilizar
- #7. ¡No olvides las etiquetas ni la información fundamental!
- Ideas de packaging en cosmética
El packaging es uno de los elementos más importantes en un producto cosmético, sobre todo porque suele ser la carta de presentación del mismo; lo primero que entra en contacto con el potencial consumidor. ¿Pero sabes qué es exactamente y cómo debes escoger el más adecuado para tu producto? ¡Te contamos todo lo que necesitas saber sobre packaging en cosmética en este post!
¿Qué es el packaging en cosmética?
El packaging se puede definir como el embalaje de un producto; lo que se utiliza como protección para poder distribuirlo, almacenarlo, venderlo y, finalmente, usarlo. Más concretamente, el packaging se puede definir teniendo en cuenta sus dos principales objetivos:
- Funcional: el packaging se encarga de, como hemos dicho, proteger el producto para poder hacerlo accesible en el transporte, distribución, venta y manipulación.
- Comunicacional: el packaging también tiene como objetivo transmitir información del producto (como los ingredientes u otros elementos) y llamar la atención del consumidor a través de su forma, colores, etc.
De este modo, no debes olvidar que el packaging va a ser siempre la primera toma de contacto que tendrás con tu cliente. Por lo tanto, ya estarás intuyendo por qué es tan importante, puesto que no solo debe proteger adecuadamente el producto y su contenido, sino que debe transmitir bien lo que es la marca y llamar, a su vez, la atención de tu potencial cliente.
Cómo diseñar el packaging de tu producto cosmético
A la hora de pensar en cómo quieres que sea y, sobre todo, cómo debe ser el packaging de tu cosmético es muy importante que tengas en cuenta algunas cuestiones que te ayudarán a tomar las decisiones más acertadas. Por ejemplo, ¿quién es tu cliente objetivo? ¿cómo compra este cliente? ¿cuál es tu identidad de marca?
Una vez tengas claro todo esto, será el momento de dar el siguiente paso y pensar más concretamente en el diseño en sí. ¿Qué tipo de materiales puedes escoger? ¿Qué estilo deseas transmitir? ¿Qué debe aparecer en el propio packaging? Estas son algunas de las preguntas que debes plantearte a la hora de diseñar el packaging de tu producto cosmético.
¡Tranquilo! Vamos a verlo más detenidamente:
1. Piensa en tu cliente objetivo y defínelo
Ya sabrás que antes de tomar cualquier decisión en tu negocio es fundamental que pienses siempre en tu cliente objetivo. ¿Quién es este tipo de cliente? ¿Qué edad tiene, cuál es su género, cuáles son sus aficiones y cuáles son sus principales objetivos en cosmética?
Definir exactamente a tu cliente, pudiendo hacer incluso un buyer persona, te ayudará enormemente a la hora de definir tu packaging en cosmética. Así, podrás saber qué espera de un producto cosmético y de su packaging: qué necesita, qué le va a llamar la atención, cuál va a ser su primera opción…
2. Investiga cómo compra este cliente objetivo
Del mismo modo que es importante conocer quién es tu cliente objetivo, debes también conocer cuáles son sus hábitos de compra. ¿Por qué? Porque así vas a saber también qué packaging necesitas para venderlo.
Por ejemplo, ¿vas a vender mayoritariamente online? Entonces, necesitarás contar también con un packaging extra como una caja de transporte. ¿Vas a vender solo en tiendas físicas porque así compra tu cliente habitual? Pues tu packaging deberá ir orientado a este medio.
Valora muy bien cuál va a ser la cadena de distribución y de venta para poder determinar adecuadamente los tipos de packaging que van a ser necesarios para tu empresa y para tu cosmético.
3. Identifica tu identidad de marca
Cómo no, para poder crear un packaging acorde a tu marca debes analizar muy bien cuál es tu identidad. ¿Cuáles son tus valores? Recuerda que el packaging debe reflejar muy bien dichos valores.
Por ejemplo, si eres una marca que apuesta por el medioambiente, deberás tener un packaging que se pueda reciclar y que sea también respetuosos con el mismo. Del mismo modo, determinar cuál es tu personalidad te ayudará a saber qué elementos deben incorporarse en el packaging y en su diseño.
4. Conoce los materiales más comunes en packaging
A la hora de crear el packaging para un producto cosmético, es necesario conocer cuáles son los principales materiales que se pueden emplear. Estos son:
- Plástico: el plástico es uno de los materiales más comunes utilizadas en el packaging, aunque este se está descartando cada vez más en cosmética natural, sobre todo si la marca tiende a ser sostenible.
- Cartón: en este caso, el cartón es uno de los más empleados en cosmética natural y, en general, en aquellos productos de marcas que se preocupan por el medio ambiente (siempre y cuando el contenido lo permita).
- Vidrio: se trata de un material más frágil que el resto, pero que se suele utilizar también mucho, sobre todo en cosméticos.
- Aluminio: aunque es una opción de packaging, lo cierto es que no es el más utilizado. Su principal desventaja es que es más complicado personalizar la forma y tiene más limitaciones en cuanto a los acabados; aunque su opacidad permite una mayor protección del contenido del producto frente a la luz.
5. Elige tu estilo
Acorde con la identidad de marca y a los materiales, deberás determinar muy bien cuál es el estilo que quieres reflejar en tu packaging. Este estilo deberá ir en consonancia también con tu público ideal y lo que espera de tu marca.
Por lo tanto, este es uno de los pasos más importantes a la hora de diseñar tu packaging en cosmética: ¿qué tipo de estilo es más adecuado? ¿algo más juvenil o más señorial? ¿más colorido o más sobrio? ¿se quiere transmitir lujo?
Recuerda que todas las decisiones que tomes en cuanto a estilo (y en general, en cuanto al packaging) deben ir destinadas a un mismo objetivo.
6. Decide los colores y la tipografía que quieres utilizar
Cuando tengas claro el diseño que le vas a dar a tu packaging, es el momento de hilar un poco más fino y empezar a decidir algunos detalles cruciales: los colores y la tipografía. Ambos juegan un papel muy importante en el packaging y van a servir tanto para reflejar tu marca como para llamar la atención. ¡Así que piensa bien en ellos!
A la hora de pensar en colores es muy interesante que pienses en su significado: si quieres algo que represente pasión, pureza, calma, vida, naturaleza… Cada color te ayudará a ello.
En cuanto a la tipografía, también es importante seleccionar una que sea acorde a tus valores, a tu identidad, que sea única y fácil de reconocer.
7. ¡No olvides las etiquetas ni la información fundamental!
Por último, todo packaging debe incluir cierta información fundamental, tanto en el propio envasado como en las etiquetas que se incluyan. ¡No te olvides de esto! La información que necesitas es:
- Fechas de caducidad.
- Información como que no es testado en animales u otras etiquetas relativas.
- Los ingredientes.
- Imágenes e ilustraciones.
- Alguna frase de reclamo si fuera necesario.
Ideas de packaging en cosmética
Ya has podido comprobar que la elección del packaging en cosmética es esencial por diferentes motivos e implica tomar diferentes decisiones. Pero si aún sigues teniendo algunas dudas, te ofrecemos un listado de los tipos de packaging más utilizados para productos cosméticos.
Ten en cuenta los consejos anteriores y observa si alguna de estas ideas se puede adaptar a tu próximo lanzamiento.
Tubos de plástico
Los tubos de plástico son unos de los tipos de packaging más utilizados en cosmética. Los habrás visto, sobre todo, en cremas o productos capilares como champús, geles, acondicionadores… Es decir, en aquellos productos que contienen productos más densos y que se suelen utilizar con bastante frecuencia o en zonas más delicadas (como la ducha, donde se puede resbalar).
Tarros de vidrio
Los tarros de vidrio son otros de los protagonistas en el packaging en cosmética y lo cierto es que también se suelen utilizar en cremas, perfumes, etc. Esta es una opción escogida también por marcas que apuestan por una cosmética más sostenible y que quieren evitar el uso de plásticos, por ejemplo.
Además, este tipo de packaging permite ofrecer un acabado más delicado y elegante.
Monodosis
Es un tipo de envase que se utiliza en productos cuya idea es utilizar una sola vez (por ejemplo, para muestras de prueba, productos dentro de un tratamiento que tienen una dosis específica…).
Dosificadores
Los dosificadores son un tipo de packaging que facilita mucho el uso de los productos cosméticos. Suele utilizarse también en geles, limpiadores, champús… es decir, en aquellos cosméticos de uso habitual que requieren rapidez y sencillez.
Spray
El spray está especialmente pensado para cosméticos líquidos, como pueden ser algunos tónicos, esencias, perfumes, productos capilares… Este tipo de envase ayudará a pulverizar tu producto.
Como ves, el packaging en cosmética no es algo que deba tomarse a la ligera y juega un papel tan importante en tu marca como lo hace tu propio producto. ¿Has tomado ya alguna decisión para tu próximo producto cosmético?
Si estás pensando en emprender o quieres seguir aprendiendo sobre cosmética, te invitamos a apuntarte a alguno de nuestros cursos online de cosmética natural. ¡Te enseñaremos sobre esto y mucho más!
No olvides darte una vuelta por nuestro blog para aprender sobre más temas y unirte a nuestra newsletter para que no se te escape ninguna novedad.
¡Forma parte de Mentactiva! Te estamos esperando.