Los flavonoides en cosmética son muy utilizados y no es de extrañar, puesto que tienen múltiples propiedades de lo más beneficiosas para la piel. En el artículo de hoy te detallamos un poco más sobre este elemento y las diferentes aplicaciones que tiene.
¿Qué son los flavonoides?
La palabra flavonoide proviene del latín “flavus” y significa amarillo. Son responsables de muchos de los colores de las plantas como las hojas de los árboles en otoño y los colores de las flores.
Están formados por 15 átomos de carbono distribuidos en tres anillos, 2 de ellos bencénicos y uno heterocíclico -contiene oxígeno- entre ellos. Se clasifican en 6 grupos dependiendo de su estructura química: flavonas, isoflavonas, flavonoles, flavanoles, flavanonas y antocianidinas.
En la naturaleza se pueden encontrar de forma libre o unidos a azúcares formando glucósidos.
Los flavonoides son el grupo más abundante de compuestos vegetales activos; se han extraído e identificado más de 5000.
Propiedades de los flavonoides en cosmética
Los flavonoides poseen propiedades beneficiosas para la piel. Éstas tienen carácter preventivo, reparador e incluso estimulante. Por ello se utilizan en cosmética incorporando extractos de determinadas plantas que los contienen, en los productos cosméticos. Veamos cuáles son esas propiedades y cómo están relacionadas con su estructura molecular.
Los flavonoides como antioxidantes
Durante el envejecimiento cutáneo tienen lugar dos tipos de procesos relacionados con los radicales libres, unos internos debidos a alteraciones de nuestro sistema antioxidante y otros externos como la radiación solar. El resultado es un grave daño celular a través de estas especies reactivas de oxígeno –ROS, Reactive Oxygen Species-. La aplicación cutánea de activos cosméticos antioxidantes es muy importante para neutralizar los productos dañinos que se generan. En este sentido, los flavonoides han demostrado tener un efecto muy beneficioso.
De hecho, la actividad más conocida de los flavonoides en la piel está asociada a sus propiedades antioxidantes. Estos compuestos son capaces de proteger al cuerpo de los radicales libres, que se producen durante el metabolismo normal o por efectos externos (exposoma). Los radicales libres son especies con electrones desapareados muy inestables y por lo tanto muy reactivas. La estructura química de los flavonoides con los 3 anillos comunicados favorece la captación de estos electrones desapareados que se deslocalizan por la molécula soportando mejor así la inestabilidad que produce este exceso de electrones.
De esta forma el radical libre deja de ser una molécula inestable y reactiva. Así se detiene la cascada de reacciones de oxidación que promueven el envejecimiento cutáneo. Los flavonoides inhiben varios factores que inducen la generación de ROS, lo que evita una mayor generación de ROS y el envejecimiento de la piel. En la siguiente imagen vemos el mecanismo simplificado. El radical libre intenta atraer un electrón de otra molécula (diana) oxidándola para recuperar la estabilidad. Sin embargo, en presencia del antioxidante es éste el que aporta el electrón que requiere el radical libre y así evita la oxidación de la molécula diana.
Los flavonoides derivados de las hojas y semillas de té verde y las hojas de parra, así como los oligómeros de estos compuestos que se encuentran en la corteza de pino mediterráneo (pycnogenol), se consideran los más eficaces para proteger la piel de los radicales libres.
Afinidad de los flavonoides por los receptores estrógenos
El avance en el conocimiento ha demostrado que existe una estrecha relación entre la piel y el sistema endocrino. Las hormonas juegan un papel fundamental en el desarrollo, maduración y funcionamiento normal de las estructuras que forman la piel y sus anexos: pelo, uñas, glándulas sebáceas y glándulas sudoríparas. Además, la piel tiene la capacidad de producir hormonas y sustancias con actividad parecida a hormonas necesarias para su funcionamiento normal, por lo que se puede considerar como un órgano endocrino. En la piel podemos encontrar receptores de hormonas como los estrógenos y lo andrógenos que median proceso relacionados con la pigmentación de la piel, la generación de sebo o el ciclo capilar.
Muchos flavonoides tienen una fuerte afinidad por las estructuras de las proteínas. Precisamente, en cuanto a su actividad cosmética, una de las propiedades más importantes de la unión de los flavonoides a las proteínas es su afinidad por los receptores de estrógenos. La daidzeína es una isoflavona de origen vegetal (mayormente en legumbres como la soja) con estructura química muy diferente, pero con una geometría similar a la del estradiol. Por ello es capaz de mimetizar a esta hormona encajando en sus receptores y producir efectos parecidos. Aunque son inferiores, interaccionan lo suficiente para reducir los efectos de la edad y mejorar la calidad de la piel, ya que están implicados en la producción de colágeno.
Actividad antiinflamatoria de los flavonoides
La actividad antiinflamatoria de estos compuestos se debe a sus complejas interacciones con factores proinflamatorios y enzimas, que participan directa o indirectamente en la generación o propagación de las etapas inflamatorias.
Debido a su capacidad para eliminar los radicales libres, los flavonoides inhiben los procesos oxidativos de los lípidos de la membrana que inducen la formación de ácido araquidónico. Esta molécula tiene un papel fundamental en el proceso inflamtorio.
Además, debido a su afinidad por las proteínas y los metales, los flavonoides de quelación -captación de metales pesados- inactivan enzimas específicas de la cascada inflamatoria, contribuyendo así a mejorar el proceso inflamatorio. Un ejemplo de ello son los glucósidos de apigenina que se encuentran en la manzanilla. Por tanto, aplicados tópicamente sobre la piel alivian los síntomas inflamatorios.
Propiedades antihistamínicas
La histamina es una sustancia presente en algunas células del organismo que provoca muchos de los síntomas de las alergias. Los flavonoides quercetina, kaempferol y miricetina inhiben la liberación de histamina de los mastocitos, células encargadas de sintetizar y almacenar la histamina. Estas células vigilan atentamente los movimientos “peligrosos” para el organismo. Por ello se encuentran principalmente en los órganos que están en contacto con el mundo exterior como son la piel, el tubo digestivo y las vías respiratorias. Un exceso de histamina en la piel provoca dermatitis, urticaria y picores.
Algunos flavonoides son capaces de inhibir la liberación de histamina y otros son inactivos. La inhibición está determinada únicamente por la estructura del flavonoide. La quercetina es eficaz para inhibir la liberación de histamina. No obstante, la morina, que se diferencia de la quercetina sólo en la configuración del grupo OH de un anillo, no inhibe la liberación de histamina. Esto demuestra la importancia de la posición del grupo OH en la actividad del flavonoide.
Aplicaciones de los flavonoides en cosmética
Los flavonoides se aplican generalmente mediante el uso tópico de extractos botánicos de plantas ricas en dichos compuestos. Debido a las acciones que comentamos en el apartado anterior, los extractos ricos en flavonoides se aplican en cosmética como antioxidantes, antienvejecimiento y protectores. A continuación, comentamos los extractos más utilizados.
- El extracto de polifenol purificado de té verde aplicado tópicamente inhibe la inflamación inducida por los rayos UV4, combate el daño del ADN5 y reduce la formación de especies reactivas de oxígeno (ROS).
- La miel puede tener efectos beneficiosos para nuestra piel debido en gran parte a la diversa gama de flavonoides y ácidos fenólicos que contiene.
- La apigenina (presente por ejemplo en la manzanilla común) aumenta el grosor y la elasticidad de la dermis, reduce la profundidad de las arrugas, mejora el tono de la piel y su contenido de humedad.
- La rutina (o su glucósido rutósido) se puede encontrar en el trigo sarraceno. A nivel cosmético aumenta la elasticidad de la piel y disminuye el tamaño y la cantidad de arrugas.
- Los flavonoides de la soja (como la genisteína y la daízdeina) tienen actividad estrogénica, estimulan la producción de colágeno y aumentan el grosor de la piel.
- La hesperidina, presente en extractos de piel de cítricos, tiene un fuerte poder antioxidante.
- La caléndula contiene isorhamnetin, quercetina, calendoflavosida y rutina. Se utiliza en cremas de cara, de cuerpo y bálsamos con acción protectora y antiinflamatoria.
- El perejil contiene apigenina, luteolina, quercetina y kaempferol. Se suele utilizar en serums para ojos por su acción antiinflamatoria y antiedad.
Productos avanzados: nanoformulación cosmética
La aplicación de la nanotecnología ha mejorado el campo de la cosmética en los últimos años. Numerosas variedades de nanopartículas, como nanopartículas poliméricas, nanosuspensiones, nanoemulsiones, liposomas, niosomas, dendrímeros, se han apoderado del campo de las formulaciones cosméticas. El uso de nanoformulación ha ayudado a mejorar la penetración de los activos, como los flavonoides, para que realicen su acción a nivel de los receptores adecuados (receptores hormonales, de histamina,…).
Hay estudios en los que se ve un aumento de la absorción cutánea (a nivel farmacológico) de flavonoides de especies como Polygonum aviculare usando liposomas o Phyllanthus utinaria usando nanoemulsiones.
La nanotecnología puede aplicarse tanto en la fabricación del producto cosmético (como la elaboración de nanoemulsiones) como en la fabricación de materias primas (como en el caso de los liposomas). En este último caso hay que revisar la reglamentación relativa al uso de nanopartículas.
Tanto si desarrollamos una nanoemulsión como si usamos productos que liposomados, estaremos mejorando la eficacia del activo o del extracto. En el caso de los flavonoides lo más habitual es que se aplique a la molécula aislada.
Conclusión
Los flavonoides son un grupo diverso de polifenoles vegetales con propiedades beneficiosas para la piel. A menudo son responsables de los colores de muchas frutas, verduras y flores. En las plantas, estos pigmentos las protegen del estrés ambiental, ya que son potentes antioxidantes. Aplicados a nivel tópico, los flavonoides en cosmética tienen efectos antioxidantes, fotoprotectores, antiinflamatorios y antihistamínicos.
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Referencias
https://www.theskincarechemist.com/glossary/flavonoids/
https://www.mdpi.com/2079-9284/8/4/106/htm#B193-cosmetics-08-00106 Natural Antioxidants from Plant Extracts in Skincare Cosmetics: Recent Applications, Challenges and Perspectives, Cosmetics 2021, 8(4), 106
Musthaba, S.M.; Ahmad, S.; Ahuja, A.; Ali, J.; Baboota, S. Nano approaches to enhance pharmacokinetic and pharmacodynamic activity of plant origin drugs. Curr. Nanosci. 2009, 5, 344–352.
https://www.sochiderm.org/web/revista/28_3/25.pdf
https://coloradoaromatics.com/bioflavonoids-skin-care/
https://oushia.com/los-flavonoides/